sábado, 17 de enero de 2009

Iñaki Ábalos: el futuro del rascacielos



"En la actualidad el 'verticalismo', la concepción del espacio y de la ciudad contemporánea en términos verticales, aún no ha hecho más que empezar. Estamos asistiendo a un apasionante proceso de transformación. Hemos comenzado a pensar la ciudad -y las ciudades históricas- desde posiciones que sustituyen eficazmente la bidimensionalidad del urbanismo por un nuevo verticalismo."

Son palabras de Iñaki Ábalos, que en un artículo que publica hoy "El País" hace una interesantísima reflexión sobre el futuro de la construcción en altura. Me parece especialmente destacable el análisis que hace de ciertos rascacielos mediocres de los que, desde una concepción urbana y social, disponen ciudades como Madrid, que en las últimas décadas han carecido de una línea de actuación en gestión urbana coherente, sensible y sensata.

Ábalos hace una apuesta por el verticalismo como solución para el futuro de las ciudades europeas, y reflexiona sobre la reconcepción de espacios verdes para su interacción y complementariedad con las construcciones verticales.

EL PAÍS: "Verticalismo", por Iñaki Ábalos

viernes, 9 de enero de 2009

Carme Pinós: "Me emociona tener responsabilidad social"



ENTREVISTA DE NURIA NAVARRO PARA "EL PERIODICO DE CATALUNYA" (9/1/09)

--Cerró el año con un Premi Nacional d'Arquitectura. No está mal.
--Un año alucinante, el 2008. Celebro las oportunidades que me ofrece el premio, pero siento que ahora empieza el camino.

--Hace años que camina. ¿El reconocimiento llega demasiado tarde?
--Nunca es demasiado tarde.

--Hizo tándem con Enric Miralles, se separaron y se supo poco de usted.
--Yo seguí trabajando con la misma filosofía.

--¿Qué filosofía es esa?
--Tener muy presente el contexto. Saber que, de algún modo, haces ciudad. Procurar entender en cada momento qué lenguaje hay que usar.

--Los hay que prefieren construir pirámides.
--Yo no pretendo hacer arquitectura de marca. Entiendo la arquitectura como un servicio. Creo que los espacios públicos tienen que recoger la memoria colectiva y, a la vez, aspirar a ser el máximo de sublimes.

--A usted la pierden las ventanas.
--Siempre he necesitado que mi mirada se escape. Me cuesta estar en interiores cerrados.

--¿Qué diría Freud a eso?
--Bueno... De pequeña vivía en una gran casa de campo, en Balaguer. El fuera era tan importante como el dentro. De algún modo, en mi arquitectura nunca caminas hacia una pared. Siempre hay un paso de luz. Yo hago una arquitectura que da una perspectiva, que no atrapa.

--Un buen ejemplo es su Torre Cube, en la mexicana Guadalajara.
--De algún modo me define, sí.

--¿La mujer maneja el espacio de una manera distinta?
--Sí, sí. No tengamos miedo a decirlo. La relación de las mujeres con la vida es diferente. Más terrenal. Ortega y Gasset escribió: "La mujer es, el hombre es lo que hace". Recuerdo que al principio me molestó la frase, pero he llegado a estar de acuerdo. La mujer tiene mayor conciencia de su ser. El hombre, en cambio, en el momento en que no es reconocido, se siente más débil.

--¿Cómo se traduce eso en la obra?
--A mí me emociona tener responsabilidad social. Creo que en eso consiste mi mirada femenina.

--Ha crecido junto a grandes hombres: su padre, Moneo, Miralles.
--Mi padre hizo lo que soy. Murió de leucemia cuando yo empezaba Arquitectura. Ya muy enfermo me llamaba y me repetía la importancia del conocimiento y de las convicciones firmes. Moneo, por su parte, fue el primero que me enseñó a pensar la arquitectura en mayúsculas. Y Enric... ¡Murió a los 45 años, pero vivió 90! Tenía una curiosidad inmensa. Lo leía todo. Todo le interesaba.

--Lo pasaron bien juntos.
--Vivíamos en la arquitectura. Él era un gran dibujante, un hombre muy habilidoso, y yo... quizá aporté experiencias más de la tierra, del contexto. Nos entendimos y organizamos el diálogo. Recuerdo que el primer concurso al que nos presentamos juntos lo ganamos.

--Luego se separaron. ¿Costó emprender el viaje en solitario?
--Al principio fue como si me hubiesen cortado los brazos... Pero nunca dejé de hacer concursos. Y he tenido a mi lado a gente muy buena, y he estado atenta a lo que se me pedía en cada momento.

--¿Qué le parece Barcelona?
--Barcelona tiene cosas muy buenas, pero se vende demasiado como producto de consumo. ¡Hasta le hemos pedido a Woody Allen que nos haga una película!

--¿Cómo debe ser una ciudad?
--Debe ser un espacio de convivencia y de producción. Barcelona debería prestar más atención al Eixample. Soy muy crítica con el Eixample. Mucho.

--Entramos en el 150° aniversario del Plan Cerdà. Póngale nota.
--Lo suspendo.

--¡¿Qué me dice?!
--Cerdà pensó en las infraestructuras de movilidad, pero no supo entender a la burguesía catalana. Es el responsable de la actual densidad de circulación.

--Propuso interiores de isla de ensueño.
--Cuando un plan urbanístico no acaba siendo lo que pretendía es que algo ha fallado.

--Si le prestan una demoledora, ¿qué tira?
--Algunas esquinas. Muchos edificios que representan la especulación, hechos sin alma, sin la generosidad de hacer ciudad.

--¿Arquitectura es generosidad?
--Arquitectura es espacio, y espacio experimentado. En las manos del arquitecto está, de algún modo, el hacer una vivencia agradable o desagradable. Una escalera puede transformar a una persona en elegante o en ordinaria. Y esa responsabilidad me emociona.

Carme Pinós - Estudio de Arquitectura
Fuente: El Periódico de Catalunya

viernes, 2 de enero de 2009

Daniel Libeskind. Rascacielos "verde" en Manhattan



Daniel Libeskind propone para Nueva York una torre ("Met Life Tower") de más de 200 metros de alto, con 54 pisos destinados mayoritariamente a vivienda. Lo sorprendente es el enfoque "pseudo-verde" del rascacielos.

Los primeros diseños muestran una intención por dejar a la vista porciones de terrazas verdes en altura.



Según ha explicado Libeskind, “Hemos quitado espacio de los apartamentos para poder crear los jardines", que son, de hecho, balcones integrados en la propia piel del edificio. "Parece que la naturaleza ha vuelto a la ciudad", dice el arquitecto.



El promotor está convencido que la etapa de crisis económica mundial en la que vivimos se habrá suavizado entre ahora y el instante de iniciar el proyecto.

Fuente: NYmag

Sevilla tendrá un CaixaForum



La Fundación La Caixa solicitó ayer a la Consejería de Cultura la concesión durante 75 años de las Reales Atarazanas de Sevilla para instalar en él un CaixaForum, un prestigioso equipamiento destinado a la difusión cultural, con el que ya cuentan ciudades como Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca.

La fundación hará una inversión mínima de 20 millones de euros para adecuar el edificio histórico sevillano, y conllevará la realización de actividades culturales diversas con presupuestos anuales superiores a los cuatro millones de euros. La solicitud lleva aparejada el compromiso de CaixaForum de salvaguardar los elementos patrimoniales de las naves que componen el edificio, cuya superficie es de unos 6.500 metros cuadrados.

Construidas en 1252 por mandato del rey Alfonso X el Sabio, las Reales Atarazanas constituyen, junto a la Giralda y a la Torre del Oro, parte del Patrimonio Histórico emergente más antiguo de Sevilla. Las Reales Atarazanas comenzaron como frente industrial hacia el Arenal de Sevilla abierto a la entrada y salida de barcos del puerto. Su actividad como astilleros provocó su primera transformación. En el siglo XVII, cinco de sus 17 naves se convirtieron en el Hospital de la Santa Caridad. En 1719 comenzaron a utilizarse como almacenaje de artillería, aunque ya en 1587 se produjo bajo el reinado de Felipe II el primer asentamiento de dependencias artilleras. En 1782 se producen otras nuevas reformas conformando las siete naves de las que se compone hoy día el edificio.

Fuente/Imagen: El País